sábado, 27 de junio de 2015

otra vez el Ministerio de Justicia quiere perseguirme

Recibí citaciones para comparecer en los términos del artículo 62 del decreto 467/99, ello en el marco de los exptes 6238/12 y 6239/2012. 
1.    En primer lugar llamar la atención que me citen como imputada cuando en sede penal se manifestara que no hay constancias en los citados sumarios que pudieran evidenciar mi participación en los hechos investigados. Claramente se intenta desde hace meses culparme del robo de dos exptes vinculados con el escándalo Ciccone, a pesar de que fui quien denuncio y puso en conocimiento de las autoridades (las mismas que ahora pretenden culparme) de las irregularidades que ocurrían en la IGJ con este caso.2.    En segundo lugar, reitero lo que denuncie en reiteradas oportunidades y lo que debería ser objeto de investigación. Fui víctima de acoso y violencia sistematizada por parte de distintos funcionarios del Gobierno argentino. Denuncie que había una persona usurpando un cargo de Subinspector General, quien daba órdenes y pedía exptes (particularmente los relacionados con el caso Ciccone). Pero el acoso sufrido no se limitó solamente al Sr. Varela, sino que también se sumó el del Inspector General Norberto Berner, (también militante de la agrupación La Campora) quien asume a fines de mayo de 2012 e inmediatamente dicta dos circulares para establecer un cepo informativo en relación a la información obrante en el Registro Público de Comercio en la Inspección General Justicia. Este cepo fue dispuesto con motivo de los pedidos de informes que se suscitaban en relación a cualquier sociedad vinculada a funcionarios del gobierno argentino, principalmente con las sociedades vinculadas al caso Ciccone. Así intentaban obligarme a denegar información con un criterio arbitrario e ilegitimo sin ningún tipo de aval jurídico ya que yo era el funcionario que debía tomar estas decisiones conforme mis funciones y responsabilidades. Cabe destacar que recientemente la Corte Suprema de Justicia se expidió en relación a la limitación de la información en la Inspección General de Justicia, estableciendo que la información es publica y no se puede requerir ningún interés especial (en autos Gil Lavedra Ricardo c/ Ministerio de Justicia s/ amparo”. Denuncie a mis superiores jerárquicos todas las irregularidades que ocurrían en la IGJ. En fecha 26-09-12, luego de varias citaciones y entrevistas con el Servicio Médico del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, se me citó para la realización de un psicodiagnóstico en el Ministerio de Salud. El mismo se desarrolló en dos etapas, una realizada el 26-09-12 y la otra el 04-10-12. En fecha 11-10-12 me citaron telefónicamente a asistir al sector de Salud Ocupacional del Ministerio de Salud el día 17 de octubre a las 12.30, oportunidad en la cual me entrevistó un médico psiquiátra y me informó como resultado que no me encuentro en condiciones para volver a mi trabajo, por lo cual se extendió mi licencia médica. En fecha 10 de agosto de 2012 denuncie ante la IGJ los hechos aquí relatados (expte N° 5109026/2863608). En fecha 10-09-12 se presentó un pronto despacho atento a que no existía movimiento alguno registrado del trámite iniciado, ello mediante el control vía internet y en fecha 18 de octubre, atento el silencio de la administración, presente ante la IGJ recurso de reconsideración con jerárquico en subsidio. Por tal motivo, presente en la Mesa de Entradas del Ministerio citado una denuncia dirigida al Sr. Ministro de Justicia y Derechos Humanos Julio Alak en fecha 19 de octubre de 2012. (Expte N°S04:0053188/2012) Según surge del citado expte la actuación estuvo hasta el día 02/11/2012 en el gabinete de asesores del Sr. Ministro, remitiéndose ese día al Despacho del Secretario de Asuntos Registrales Dr. Oscar Martini, quien ordenó el día 08/11/2012 al Subsecretario de Coordinación y Control de Gestión Registral Dr. Ernesto Kreplak que la Inspección General de Justicia produzca informe a la brevedad y este último remite la Dirección de Recursos Humanos el día 12/11/2012. Finalmente mi denuncia es girada a la IGJ el 7 de diciembre de 2012, destacándose que al momento de recibirse mi denuncia se decide despedirme de mi puesto de trabajo. El 10 de diciembre de 2012 la denuncia que efectuará se remite a la oficina judicial de la IGJ, ordenando dicho pase el Sr. Berner (uno de los funcionarios por mi denunciados). Recién a fines de 2013 se resuelve el inicio de un sumario a fin de investigar los hechos investigados, destacándose que se impugno la tramitación del sumario, toda vez que no se cumplía con el procedimiento establecido por el Reglamento de Investigaciones Administrativas (dilación en el tiempo, carencia de orden cronológico, parcialidad de los instructores), dejándose constancia que debía intervenir la Procuración del Tesoro, por el carácter de los funcionarios involucrados. Este planteo fue rechazado mediante resolución N° 1 del 6 de marzo del 2014. Así estuve durante meses. Notificada del decreto 601/13 que dispuso el cese en mis funciones al 31 de octubre de 2012, pero dictándose el mismo recién el 27 de mayo de 2013 y notificándose el 5 de junio, presenté recurso de reconsideración, fundando el mismo en la nulidad absoluta y manifiesta del mencionado decreto, el cual carecía de causa, objeto y motivación. Sin embargo, el 10 de febrero de 2014 se dicta el decreto 359/14 el cual desestima el recurso. En dicho decreto la Sra. Presidenta de la Nacion manifiesta, en algo inédito, que decide no renovar mi designación enterada de mis denuncias.  Ahora bien, mediante expte 57252/2012, iniciado el 13 de noviembre de 2012, se dispuso la designación de Susana Graciela Junqueira como Directora del Registro Nacional de Sociedades, a partir del 1 de noviembre de 2012. Qué casualidad, dicha funcionaria también está relacionada por diferentes agentes como la persona que estuvo en contacto con los epxtes extraviados. El expte que la designa adolece de múltiples irregularidades que fueron denunciadas en sede penal. Así cabe mencionar la falsedad en las declaraciones juradas, la falta de desempeño efectivo del cargo, un apto medico totalmente desactualizado atento hallarse en condiciones de jubilarse la funcionaria nombrada (año 1972), sumado al cobro de manera retroactiva un segundo salario en la función pública, algo que está prohibido por ley. Esta designación es a todas luces nula, en virtud de la declaración jurada de Junqueira en la que afirmó que su eventual designación no vulneraba la ley marco de Regulación del Empleo Público, aun cuando la incumple, ya que supera la edad prevista en la ley previsional para acceder a la jubilación.
3.    Ahora bien, la persecución que sufro por parte de diferentes funcionarios del Ministerio de Justicia nunca termina. Así y luego de editar tramos de un sumario interno, se presentaron en la causa N° 6605/2012 como querellante para acusarme del extravío o robo dentro de la IGJ los legajos de The Old Fund, la ex Ciccone Calcográfica cuando estalló el "caso Ciccone". Ahora bien, declaré como testigo ante la Justicia, señalando que aunque la IGJ había anunciado la completa reconstrucción del legajo de la empresa que la justicia le atribuye al vicepresidente para apropiarse de la empresa que imprime los billetes en la Argentina, faltaban 18 páginas de la actuación original, y la reconstrucción incluían datos adulterados. Aun el expte continúa igual. Pero en lugar de preocuparse en la reconstrucción (fundamental para el proceso judicial en el cual está procesado el vicepresidente de la Nación) deciden insistir en culparme a mí.
4.    La Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA) reveló las múltiples fallas que detectó en el sumario (en el que ahora me citan). "Deberá volver a reconstruirse el legajo, ya que la reconstrucción no se ha realizado correctamente, según informes que surgen del propio sumario", alertó la Fiscalía, que indicó que el legajo "tendría que tener 22 hojas, mientras que el trámite por el que se tiene por reconstruido cuenta sólo de tres hojas", remarcó uno de los fiscales que integran la FIA, Ricardo Renom, y analizó las actuaciones. Varios meses después del dictamen de la Fiscalía, sin embargo, la IGJ no siguió sus recomendaciones ni corrigió el sumario. Por el contrario, se presentó ante la Justicia, donde pidió ser querellante en la investigación sobre las desapariciones de ese legajo y el de la ex Ciccone, por los que me responsabilizó. Se remarca: Los exptes reconstruidos siguen igual pese a las graves falencias detectadas. No se cumplió con las observaciones de la fiscalía. El informe de la Fiscalía además: Rechaza las conclusiones del sumariante: considera que no investigó lo que debía en el sumario (y se insiste en esta postura al intentar culparme a mi); Señala que buscó probar "no de manera prolija, sino superficial y relativamente" la responsabilidad del personal de archivo y la mía. Por eso ordena ampliar el sumario y apuntar "a los superiores que tienen a su cargo" el archivo de la IGJ.  
5.    Ahora bien, en particular el cambio de declaración de los diferentes testigos (mas allá de ser parciales ya que eran los verdaderos responsables de custodiar los exptes o estaban en relación de dependencia de ellos) se debe a las presiones que recibían. Así me fue manifestado por varios compañeros que declararon que yo pedía exptes en forma verbal (de los cuales reservo su nombre para no exponerlos a una situación de despido) que previo a recibirles declaración le informaban que había que salvarlo a Guillermo Agüero y la manera de salvarlo era culpándome a mí. Se les manifestaba que yo ya no estaba prestando funciones en el organismo y que a mí no me sucedería nada. Pero Guillermo Agüero se quedaría sin trabajo y que la manera de salvarlo era declarar en mi contra. A eso se suma, que en algunas de las declaraciones lo llevaban a Agüero a presenciar el testimonio como arma de presión para que la gente indicara que yo solicitaba exptes en forma verbal y que podía estar involucrada en la perdida de los exptes del sumario. Maniobra macabra, pero real. Cabe agregar que declaran Karina Bellizzi (responsable del archivo), su secretaria Sabrina, el segundo de Bellizzi Mariano Coronado, y Diego Rosales. Sobre este último testimonio quiero apuntar que en ningún momento le solicite exptes a dicha persona y menos en forma verbal y telefónica. Por una simple razón: era imposible ubicarlo en su puesto de trabajo. Ni aun en el periodo de vacaciones de Agüero. Por lo que nunca me comunique telefónicamente con él en su puesto de trabajo ya que nunca se hallaba en él y no tenía su número personal. Se agrega además las contradicciones en las que incurre, ya que señala que una vez le pedí exptes por teléfono y después le entregue una nota con varios exptes al hijo de Agüero. Cabe agregar que Agüero menciono en sus declaraciones que Varela solicitaba exptes y lo hacía a través mío; esto ocurría ya que el mencionado no se encontraba nombrado formalmente y para efectuar pedidos al archivo en forma escrita no podía hacerlo ya que (si bien tenia tarjetas con el cargo que usurpaba y cuenta de mail oficial) no estaba designado. También menciona a los otros directores (Luciano Palacios y Pablo Larrañaga). Destáquese que este último fue el que solicito el expte extraviado de The Old Fund SA por nota cuando según las declaraciones del propio Agüero lo solicitaba en forma verbal. Acaso porque ya sabría que los exptes estaban perdidos.
6.    Sin perjuicio de todo lo manifestado, se agrega que esta parte nunca solicito exptes en forma verbal y que todos los exptes que se solicitaban eran a través de Notas. Cabe agregar que a partir del año 2010 se llevó a cabo un operativo de actualización de datos que implicaba la presentación de las entidades inscriptas en el Organismo de la declaración jurada. Dicha declaración ingresaba por mesa de entradas y pasaba a estudio de un sector con personal a mi cargo. Dichas personas chequeaban los datos con las imágenes digitalizadas o con los datos cargados en el sistema informático. Y si ello no era posible y no se podía subsanar mediante el escaneo de los documentos, se solicitaba POR NOTA EN FORMATO EXCEL en dos copias al archivo. Una de esas notas era firmada por personal de archivo que daba cuenta del pedido efectuado. Si el archivo giraba o no los exptes no lo sé. No estaba bajo mi responsabilidad. Esa era una tarea que debía controlar Karina Bellizzi. Todas esas notas se encontraban guardadas en biblioratos en mi despacho, el cual fue desmantelado durante mi licencia y destruidos todos los biblioratos y sustraídos documentación y efectos personales. Ello ocurrió durante la gestión de Norberto Berner quien quiso llevarse mi escritorio y mis muebles y dejo el lugar desmantelado y sin la documentación que menciono. Cabe destacar que de todas formar poseo algunos comprobantes de pedidos de exptes en forma escrita que desvirtúan por completo los dichos malintencionados de Rosales, temerosos de Agüero y presionados de otros testigos.
7.    La desaparición de los extes de las sociedades relacionadas con el caso Ciccone no ocurrieron en áreas bajo mi responsabilidad, sino que el último destino de la documentación era el archivo. Tampoco tuve intervención en la reconstrucción de dichos exptes, la cual se efectuó en forma irregular ocultando información vital para la investigación judicial del caso Ciccone. Tampoco el personal que reportaba a mi persona reportaba al área Archivo ni tuvo intervención en la reconstrucción. Reitero que ninguno de los delitos e irregularidades que denuncie desde el año 2012 ocurrieron en ámbitos de mi competencia. Y siempre anoticie a las autoridades competentes administrativas y judiciales todas las irregularidades y delitos en el ámbito de la IGJ. No fui yo quien advertí la perdida de los exptes del Caso Ciccone, ya que tal como surge de las resoluciones de reconstrucción de dichos exptes (que en copia se acompaña). Tampoco se encontraban en las áreas a mi cargo sino en el archivo. La reconstrucción de dichos exptes se llevó a cabo por personal de la Oficina Judicial, dependiente de la Unidad Inspector General. No intervine en dichas reconstrucciones ni en ninguna. El personal que efectuaba la reconstrucción no me reportaba ni estaba bajo mi conducción. De la resolución N° 14/2013 que ordena el inicio del sumario con relación a la perdida de los exptes de The Old Fund SA se menciona que el Director de Sociedades Comerciales requirió el 23 de marzo de 2012 las actuaciones de The Old Fund SA al rea Mesa de Entradas y Archivo. Y el responsable de Archivo informo que el trámite no pudo ser localizado. Conforme el sistema informático del Organismo, el expte se encontraba en el área Archivo desde el día 29 de octubre de 2011. Mediante Providencia 585/2012 el Director de Sociedades Comerciales remite las actuaciones al Departamento de Asuntos judiciales a fin de reconstruir el tramite extraviado; departamento que efectuó la reconstrucción. La res. 618/2012 tuvo por reconstruida las actuaciones extraviadas. Este trámite constaba de 22 fs al momento de su perdida. Pero la reconstrucción del trámite consta de 3 fojas, faltando 19 fojas. Se reitera: no participe en ninguna de las actuaciones vinculadas a The Old Fund ni a su reconstrucción. Que por resolución N° 314/2012 se tuvo por reconstruido el trámite correspondiente a la sociedad COMPAÑÍA DE VALORES SUDAMERICANA SA, el cual se encontraba extraviado. Dicho trámite se encontraba en el área archivo desde el día 1 de febrero de 2003. La reconstrucción también se llevó a cabo en el Departamento de Asuntos Judiciales de la IGJ. Ninguno de los deptos. Mencionados estaban bajo mi competencia ni responsabilidad ni el personal que allí se desempeñaba respondía a mis órdenes.
8.    Se agrega un dato más, el cual espero no se me atribuya dado la imposibilidad fáctica de ello. Consultada la página web de la Inspección General de Justicia advertí que el trámite perdido N° 2776773 correspondiente a la reforma de estatuto de The Old Fund SA figura ARCHIVADO desde el 21 de octubre de 2014, esto es desde el día siguiente a presentar la querella en estas actuaciones. Recordemos que el trámite perdido circulaba dentro de IGJ bajo el número 2776773. Se inscribió y se ubicó en el archivo, conforme surge de la causa, en el año 2011. En el año 2012 se advierte que se había perdido pero el último registro que aparecía por el sistema informático (y por internet) era archivo con fecha 2011. La reconstrucción de dicho trámite circula bajo el número 2836716.  Ahora bien, ¿cómo la IGJ puede archivar un trámite que no se encuentra físicamente? El envío por sistema coincide con el envío físico de un expte o tramite a determinado sector. Si el trámite no aparece como pueden archivarlo en 2014. Si el trámite continúa extraviado, entonces se evidencia una manipulación del sistema informático interno de IGJ, toda vez que resulta imposible justificar el envío de un trámite que no se encuentra físicamente al archivo.  Conforme se informara en sede penal, la Oficina Judicial de la IGJ (quien se encargó de la reconstrucción y del sumario por la pérdida) pide al archivo el expte perdido en 2014 (primer error); el archivo se lo envía por sistema (obvio que no físicamente) segundo error y después de un tiempo advierten que el expte perdido en 2012 por sistema sigue girando ya que quien debería saber que se perdió (ya que lo reconstruyo) lo pide y quien lo perdió lo gira. Todo así cambiando los registros informáticos.

                   

lunes, 8 de junio de 2015

La designación de un juez militante...el responsable de mi acoso

El viernes, en el Boletín Oficial, se publicaron una docena de pedidos de acuerdo presentados por el Gobierno al Senado para cubrir cargos en la Justicia. Entre ellos el que propone que Ernesto Kreplak sea nombrado al frente del Juzgado Federal número 3 de La Plata. Kreplak, al igual que el ya mencionado Picardi, forma parte del equipo de operadores políticos sobre la Justicia que el Gobierno envió a los tribunales tras el descabezamiento de la SIDE, a fines del año pasado.
Este año Kreplak renunció a su cargo de jefe de Gestión Registral del Ministerio de Justicia para pasar a ser secretario general de la Cámara de Casación Penal. Su mayor relevancia pública la tuvo como titular del jury de enjuiciamiento contra José María Campagnoli, el fiscal que se atrevió a investigar la trama de lavado de dinero entre el empresario Lázaro Báez y la familia Kirchner.
La procuradora Gils Carbó fue quien montó esa expedición punitiva contra Campagnoli, finalmente fracasada. Kreplak, de carrera judicial, había llegado al Ministerio de Justicia de la mano de Julián Alvarez, viceministro y dirigente notorio de La Cámpora.
Desde la oposición señalan que Kreplak tuvo además participación activa en la operación desplegada en la Inspección General de Justicia para borrar huellas del escándalo Ciccone. La ex directora del Registro Nacional de Sociedades de la IGJ, Silvina Martínez, denunció entonces que el organismo había sido “copado por La Cámpora”. Terminó despedida.
El Juzgado Federal 3 de La Plata, para el que se propone a Kreplak después del correspondiente concurso, puede adquirir significación particular en tanto es el que, en caso de ser necesario, toma las funciones del juzgado 1 que tiene competencia electoral en la Provincia.
El peso del juez electoral puede ser decisivo en las PASO, incluyendo la oficialización de listas. Y también mantiene fuerte influencia en todo el proceso de la elección general.
El Federal 1 de La Plata está a cargo de Laureano Durán, un secretario ascendido a juez subrogante tras la muerte en setiembre pasado de Manuel Blanco, histórico titular de ese juzgado.
Durán, cuya situación está pronta a normalizar el Senado en el marco de la ley de subrogancias, es un producto genuino de la familia judicial, hijo de un ex juez federal y con más de 15 años de carrera en los tribunales. Sus amigos dicen que nunca tuvo militancia política y que lo “confundieron” con alguien de La Cámpora solamente “porque es joven”.
Sus pasos parecen orientados a seguir la línea tradicional. Esto es, articularse eficazmente con el sistema político en la Provincia. Así, Durán mantuvo en la secretaría electoral del juzgado a Belén Vergara, la misma funcionaria que cumplió esa tarea desde 1984 con el juez Blanco.

No parece casual que el peronismo bonaerense y el PRO no hayan producido hasta hoy ninguna queja fuerte contra Durán. No es el caso de los radicales, que pretenderían colocar en ese juzgado estratégico a un magistrado amigo.
Lo que resultó llamativo fue que desde despachos del Gobierno vinculados con operaciones sobre la Justicia se haya derramado cierta mala onda con Durán. Quizás tenga que ver con la línea de acción del nuevo juez respecto de la política.
El asunto es que Kreplak, un camporista en toda la línea, quedará al frente del juzgado que tomará cartas en cuestiones electorales en la Provincia si por alguna razón entrara en cuestión la tarea de Durán.
Difícil a esta altura creer en las casualidades.

http://www.clarin.com/politica/batalla-secreta-guerra-electoral_0_1367263343.html